El Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) recuerda a toda la ciudadanía la importancia de respetar las señales luminosas del tránsito, en especial la luz roja del semáforo, como medida esencial para prevenir accidentes y garantizar la seguridad de todos los usuarios de la vía pública. Esta conducta, aparentemente simple, puede marcar la diferencia entre una circulación segura y un siniestro vial con consecuencias graves.
De acuerdo con la Ley Nacional de Tránsito y Seguridad Vial N.º 5016/14, el conductor debe detenerse por completo ante la luz roja, antes de la línea de frenado o del cruce peatonal, evitando todo tipo de movimiento. Esta norma no solo protege a otros vehículos, sino también a peatones y ciclistas, quienes muchas veces se ven vulnerables ante maniobras imprudentes.
El artículo 62 de la mencionada ley establece que, incluso cuando el semáforo indique luz verde, no debe iniciarse la marcha si la intersección está obstruida, a fin de evitar el bloqueo del cruce. Asimismo, la luz amarilla debe ser interpretada como una advertencia: si no se podrá cruzar antes de que cambie a rojo, lo correcto es detenerse. Respetar las señales de tránsito, es un deber de todo buen conductor.
Multas por incumplimiento
Cruzar con luz roja representa una infracción gravísima y, según el artículo A62.A.2, se sanciona con una multa de 15 jornales mínimos, equivalente a G. 1.614.405. Además del impacto económico, esta conducta pone en riesgo la vida de conductores, pasajeros y transeúntes, y puede derivar en responsabilidades penales en caso de un accidente.
Desde el MOPC insistimos en que el respeto a las señales de tránsito, en especial a los semáforos, es un acto de responsabilidad ciudadana que contribuye al orden vial, reduce los niveles de siniestralidad y mejora la convivencia en las calles. Los semáforos no son simples luces, sino dispositivos esenciales para la gestión segura del tránsito en cruces, avenidas y zonas escolares.
Fecha: 13 de mayo de 2025