Las obras de la Fase B del proyecto de Defensa Costera en Pilar representan una inversión estatal de G. 422.500 millones (USD 54 millones) y constituyen una obra emblemática que marcará un antes y un después en la infraestructura urbana y ambiental de la ciudad.
Esta etapa constituye un avance decisivo hacia un modelo de desarrollo sostenible y resiliente, pues este proyecto no solo transformará el paisaje urbano, sino también la vida de cientos de familias pilarenses que serán parte activa de su construcción.
Generación de empleo y dinamización económica
Durante su ejecución, se estima la generación de aproximadamente 600 empleos directos, dinamizando el comercio local y fortaleciendo la economía regional.
La contratación se desarrolla de manera gradual, conforme se habilitan los distintos frentes de obra, lo que permitirá una incorporación ordenada y eficiente de mano de obra local. Se prevé que, al ingresar en la zona urbana de Pilar, se activen múltiples frentes de manera simultánea, lo que incrementará la demanda de trabajadores y potenciará el impacto económico en la ciudad. Actualmente, 22 trabajadores pilarenses ya forman parte activa de los tres frentes de obra.
Pilar, una ciudad resiliente y sostenible
La Fase B consolidará a Pilar como una ciudad preparada para enfrentar los desafíos climáticos y crecer con equidad y sostenibilidad.
Las labores están a cargo del Consorcio Sanitario Ñeembucú, conformado por LT S.A., Constructora Heisecke S.A. y Benito Roggio e Hijos S.A., con la supervisión del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones y la fiscalización de CIALPA S.A.
Fecha: 12 de septiembre de 2025